Cabinas de Ducha

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Siempre es difícil reformar un cuarto de baño. Darle un aire de modernidad a menudo entraña la instalación de mil y un accesorios que luego acabamos subutilizando. Las cabinas de ducha, en cambio, son un modo de enriquecer el estilo del cuarto de baño a la vez que subimos el nivel de calidad, bienestar y funcionalidad sin necesidad de atestar la estancia de trastos que lo único que hacen es estropear la unidad estética que intentamos imprimirle.

Uno de los mitos más asentados es el de la falta de espacio para instalar este tipo de sistemas. Para despejar esta idea erronea de una vez, digamos que para la instalación de una cabina de ducha totalmente funcional el requerimiento de espacio es de apenas un metro cuadrado. De la misma manera, la ubicación de la cabina no constituye un obstáculo pues el número de modelos compactos disponibles en el mercado garantiza que pueda adaptarse hasta a los espacios aparentemente más difíciles como los rincones o esquinas.

Otro mito que suele acompañar la idea de la instalación de una cabina de ducha en un cuarto de baño promedio, es aquello de que las cabinas de ducha son solo un artículo de lujo. Nada más lejos de la verdad. Actualmente estos dispositivos ya no son privativos y los precios de las cabinas de ducha son tan variados como sus modelos y pueden encontrarse cabinas de calidad desde unos pocos cientos de euros.

Además, una cabina de ducha no solo aporta lujo y confort a un cuarto de baño. A las personas mayores con poca capacidad de movimiento o aquellas personas con discapacidades motoras se les vuelve imposible utilizar una bañera. Las cabinas de ducha, en cambio, les allana completamente el ingreso en la ducha, solucionando para ellos un problema de accesibilidad muy grave.

Las cabinas de ducha, a diferencia de las bañeras, son absolutamente seguras para los niños. Esta sola ventaja es uno de los factores que más influencia han tenido en la amplia adopción de este sistema por parte de un número de usuarios cada vez mayor.

El rango de materiales que se utilizan hoy para la fabricación de cabinas de ducha es más diverso que nunca. Vidrio y aluminio, cristales y madera, acrílico y granito, fibra de vidrio y marmol o materiales plásticos y metálicos compuestos, las combinaciones son ilimitadas y muchos proveedores ofrecen distintos niveles de personalización de materiales, ofreciendo la posibilidad de seleccionar materiales y accesorios distintos.

Un ejemplo de ello es la gama de cabinas de ducha y columnas de hidromasaje Advant Center Vapor de la firma Roca, que integra en su diseño materiales nobles tales como la madera, el cristal y el aluminio, con platos de ducha de resina de cuarzo.

También las cabinas de ducha de diseño italiano se caracterizan por la rica y creativa mezcla de materiales nobles con que han sido diseñadas. Las formas que estas cabinas de ducha suelen adoptar son circulares, cuadradas y rectangulares en distintas medidas, lo cual nos ofrece la posibilidad de escoger aquella que mejor se adapte a las necesidades de dimensiones y estilo de nuestro cuarto de baño.